Pehuen Co en el Mundial del Alfajor: “Mi mayor expectativa es generar vínculos”

Alfajores Pehuén-Co, de la localidad balnearia del sur de la provincia de Buenos Aires, dirá presente en el evento que reúne a más de 300 productores de todo el país.

Ana Lía Sotelo, dueña e impulsora de la marca, es pampeana. Sotelo es originaria de Santa Rosa, donde tuvo, junto con su pareja, Gabriel Kohan, un reconocido emprendimiento gastronómico, Kiyen Witru. En 2007 ambos fueron de vacaciones a Pehuen-Có y el balneario los fascinó. Tanto que en 2009 decidieron establecerse ahí y hacer alfajores.

Antes de que participen por primera vez en la competencia, Más Industrias habló con ella para conocer mejor su historia, saber cómo se están preparando para el Campeonato y qué esperan lograr este año.

¿Cómo decidieron instalarse en Pehuén-Có para hacer alfajores?

Conocimos este lugar, nos enamoramos. Tanto a mi compañero como a mí, nos fascinó y nos atrapó. Y, como no teníamos dinero, siempre estábamos pensando qué hacer y empezamos a considerar cómo venirnos a vivir a este lugar. Entonces a mí se me ocurrió hacer algo dulce. ¿Viste que vos vas a Mendoza y tenés vino, vas a Mar del Plata y tenés los alfajores, a Bariloche o San Martín y tenés los chocolates? Bueno, por el tema del mar y la espuma de mar merengada, surgió la posibilidad de hacer un alfajor diferente. Te estoy hablando de hace doce, trece años atrás, que fue cuando empezamos con este proyecto. Y se nos ocurrió hacer este tipo de alfajores: de dulce de leche que en el medio tiene un relleno de un suave merengue, bañado en chocolate negro. Por muchos años estuvimos con sólo ese alfajor.

¿Y cuándo surgieron las otras variedades?

Hace cinco años, a mí se me ocurrió abrir una pastelería y chocolatería (Dulce Ani) y la fábrica de alfajores y ahí empezó a surgir la posibilidad y la necesidad de hacer alfajores para otros públicos. Porque está el público del alfajor de fruta, el del alfajor tradicional de dulce de leche. Y así fue como empezaron a surgir las otras novedades: los clásicos blanco o negro, el de frutilla, el de membrillo. Y desde hace dos años, por iniciativa e inquietud de una de mis hijas, también estamos elaborando un alfajor vegano: de pasta de maní, de frutos del bosque o de arándanos.

Además de vender en Pehuen-Co, ustedes envían los alfajores a Punta Alta y a Bahía Blanca.

Claro, Pehuén-Co es una localidad entre Bahía Blanca y Monte Hermoso, un lugar muy pequeño. En el verano explota y en el invierno nada, no hay gente, como casi todos los lugares pequeños de la costa bonaerense. Entonces me veo en la necesidad de buscar nuevos clientes. Y así es como ya hace un tiempo que tengo un distribuidor que visita negocios, casas de delicatessen, estaciones de servicios, fiambrerías, kioscos. Y hay gente que te pide de forma particular.

¿Cómo se vienen preparando para el Mundial del Alfajor?

Tengo muchas expectativas. Desde el año pasado que quería participar, pero no pude porque me enteré sobre la fecha. Sabiendo que este año se volvía a hacer, pedí información y de a poquito todo fue cobrando forma. A fines de julio mandé las 24 muestras y la semana pasada empezamos a elaborar la mercadería que llevo para vender y para que te conozcan. Estamos a full ya hace ya unos cuantos días. En esta instancia y por ser la primera vez, participamos con el alfajor con el que nacimos. Creo que en esta semana ya empezaron a hacer la cata de los alfajores. Así que bueno, con mucha emoción, con una alegría muy grande.

¿Qué expectativas tienen frente a la competencia?

La expectativa de ganar un premio siempre está, por supuesto, pero mi mayor expectativa es generar vínculos, conseguir clientes y conseguir ciertos proveedores de materias primas, porque yo estoy en el interior en una localidad muy pequeña y tenemos que ir a buscar todos los insumos a otro lugar.

¿En qué categoría compiten?

Yo participo en la categoría Mejor Alfajor Pyme, Mejor Galletita, porque considero que hacemos una muy buena galletita, y también Mejor Textura. Los premios son medalla de oro, medalla de plata o medalla de bronce. Y si lográs dos o más medallas de oro, podés ir a la selección para ser el Mejor Alfajor del Mundo. Pero bueno, hay que pasar las primeras instancias. Somos la única marca de alfajores de la zona que se presenta al Mundial. Hay más de la costa bonaerense: está Mar del Plata, San Antonio de Areco, Bragado, pero de esta región somos los únicos.

Fuente Más Industrias